En el marco del Plan Nacional de Recuperación de Centros Históricos (PNRCH), en 2005 el Ministerio de Cultura asignó los recursos para la contratación de la Primera Fase del Plan Especial de Protección (PEP) de Socorro, que actualmente se está gestionando a través de la Gobernación de Santander, y que permitirá la consolidación del centro urbano con propuestas que lo recuperen y exalten su enorme valor.
El origen de la población fue mucho más prosaico y sencillo. A grandes rasgos puede afirmarse que se formó a la vera del camino que conducía de Vélez a Girón, en sitio exacto donde hoy se halla ubicada. Don José de Archila y Don José Díaz Sarmiento, ricos terratenientes del Valle de Chanchón, donaron el terreno a la Virgen de Nuestra Señora del Socorro, para establecer el poblado el 16 de junio de 1683. Don Blas García de Cabrera, influyente y potentado vecino en representación de numerosos colonos, solicitò la erección de la parroquia a la curia metropolitana de Santa Fe, con tan buena suerte, que el arzobispo Don Antonio Sanz Lozano la creó por Auto del 27 de noviembre siguiente, con el nombre de Nuestra Señora del Socorro y el 2 de diciembre el presidente, gobernador y el capitán general del Nuevo Reino de Granada, Don francisco del Castillo de la Concha aprobó civilmente la nueva sección administrativa.
A solicitud del capitán Francisco Arias de Toledo y numerosos vecinos, tras cuatro lustros de constante progreso de la población, el arzobispo presidente Don Francisco de Cossio y Otero le concedió el título de ciudad en 1771, que cambió el nombre por “Ciudad de Nuestra Señora del Socorro de Cossio y Otero”, cuyas autoridades tomaron posesión el 15 de agosto. Empero, como tal gracia, no llenó los requisitos legales, es decir, que fuera concedida por el Rey de España, Felipe V la objetó e invalidó el 30 de diciembre de 1712.